Esta patología no afecta únicamente a quien la padece, sino que también perturba profundamente a su familia.
Muchas familias paulatinamente ven cambios en su ser querido que desconciertan y hacen que requiera más apoyo y supervisión. La enfermedad del Alzheimer se manifiesta al inicio por la pérdida de la memoria inmediata. A menudo, las personas que padecen la patología no encuentran las palabras adecuadas y en ocasiones las acciones que realizaban con facilidad, como cocinar o llevar cuentas ya no resultan tan exitosas y con mayor frecuencia, pueden perder interés por salir o por realizar actividades de la vida diaria.
La persona que tiene Alzheimer tiene su propia historia de vida, pertenece a un sistema familiar, tiene una personalidad, intereses y hábitos que la hace única. Asimismo, esta enfermedad se manifiesta de manera individual.
La familia tiene la oportunidad de vivir con su familiar en un ambiente de respeto, apoyándose en la unión familiar, desarrollando una escucha activa, potenciando la comunicación. Que importante es escuchar los deseos de la persona en etapas iniciales para tomar decisiones cuando ella ya no pueda hacerlo.
Establecer un diálogo permanente y apoyarse mutuamente, distribuyendo tareas para que el cuidado no sea exclusivo de un sólo familiar ayudará mucho para atender la calidad de vida de la persona con Alzheimer, así como de su familia. Una opción muy importante es asistir a grupos de apoyo donde se puede dialogar de la enfermedad y las vivencias de la familia de una forma abierta, en un ambiente de solidaridad y comprensión, fortaleciendo a la persona y buscando nuevas formas de acompañar.
Uno de los mayores obstáculos que la familia enfrenta es concentrar toda su atención en lo que la persona no puede hacer, en cuántas veces repite o pregunta lo mismo, en cómo se pierde en los lugares conocidos, añorando que el tiempo regrese y nuestro familiar sea el mismo antes de presentarse ésta enfermedad.
¿Quisiera usted que sus últimos años de vida le recuerden por lo que no puede hacer o lo recuerden por todo lo logrado a lo largo de una vida? Que gran responsabilidad tiene la familia de darle un valor significativo al acompañar a alguien que es muy vulnerable, buscando proporcionarle mayores momentos de tranquilidad y felicidad. Esto es darle la dignidad que todos compartimos como personas. Es una oportunidad de dar un testimonio de amor en el cuidado.
La Organización Mundial de la salud (OMS) declaró al 21 de septiembre como el Día Mundial del Alzheimer. |