Los obsequios hechos en casa son los más especiales. Le presentamos una alternativa deliciosa y diferente.
Que sus habilidades al hornear no pasen desapercibidas. La Navidad es el momento perfecto para aprovechar su pericia en la cocina y crear maravillas, las cuales puede regalar a sus seres más cercanos. Un presente hecho con sus propias manos vale el doble. Es uno de esos detalles únicos que simboliza todo el amor y aprecio que siente por sus allegados.
En esta ocasión le presentamos una opción súper divertida: las paletas de pastel. Son algo totalmente inesperado, que sorprenderá a quien las reciba, ganándole un sinfín de cumplidos. Las puede entregar en cajas especiales temáticas o conmemorativas y preparar con sus hijos en una tarde de diversión. De seguro serán el éxito.
