Es un paso importante a la hora de aplicar el maquillaje y le presentamos algunos secretos para que luzca perfecta.
Maquillarse bien demanda pericia y seguir pasos específicos le garantizará obtener el mejor look. Luego de preparar la piel, limpiándola y colocando hidratante, es hora de aplicar primer, corrector y la base. Esta última es trascendental. Es una loción que le permite unificar el tono del rostro. Las hay para diferentes tipos de piel y es importante saber seleccionar la adecuada para que no tape los poros.
Estas son sus texturas más comunes:
• Líquida. Para piel mixta, porque da más hidratación.
• Crema. Para piel seca, porque tiene más oleosidad.
• Mousse. Para piel seca y madura porque no marca las líneas de expresión.
También es buena para la piel grasa. Es una textura entre la base líquida y la base en crema.
Las bases tienen diferentes tipos de coberturas: Las de baja cobertura y alta cobertura. Se las utilizan dependiendo del evento.
Las de baja cobertura son óptimas para el diario y permiten un aspecto más natural. Por otro lado, las de alta cobertura son preferibles en eventos nocturnos, ya que le ayudan a conseguir un look más elaborado.
¿Cómo la coloco?
Esta loción se puede aplicar con brocha o con esponja, dependiendo el acabado y la duración que desee. Se la coloca en todo el rostro, menos en los parpados y debe prestar especial atención al cuello, escote y orejas, sobre todo si el peinado va a ser recogido.
Si la coloca con una esponja humedecida, le va a durar más. Debe hacerlo en toques para que no se perjudique el trabajo del primer y correctores, dos pasos clave que debe realizar antes de poner la base.