¿Alguna vez se ha preguntado por qué los hombres y las mujeres son tan diferentes? Le invitamos a entender por qué su pareja piensa de forma tan distinta a usted.
Las disimilitudes entre hombres y mujeres van más allá de lo que el ojo humano puede percibir. Investigaciones recientes revelan diferencias entre ambos géneros, que podrían explicar porque esperamos que nuestro compañero de vida piense y se comporte de cierta manera.
En los últimos años, académicos de la Universidad de Pensilvania se han enfocado en cuatro áreas del cerebro -el procesamiento, la estructura, la química y el flujo de sangre- para llegar a esta conclusión científica. Si bien existen excepciones, en los casos de estudio prevalecieron los siguientes resultados, que reflejan el funcionamiento del cerebro de hombres y mujeres.
Procesamiento:
El cerebro masculino utiliza casi siete veces más materia gris para realizar una actividad. De forma distinta, el cerebro femenino usa casi diez veces más materia blanca. ¿Qué significa esto? La sustancia gris está localizada en el cerebro y su existencia se relaciona con el procesamiento de la información, mas no con su transmisión. Esta es la razón por la que los hombres tienen mayor facilidad para concentrarse en una actividad específica. Se dice, inclusive, que una vez que están completamente enfocados en una tarea, carecen de sensibilidad hacia otras personas o su entorno. En otras palabras, el aparato mental del hombre está orientado más hacia la especialización.
La materia blanca, por otro lado, está compuesta de neuronas y su función principal es transportar la información. Gracias a ella, partes lejanas del sistema nervioso pueden mantener el contacto necesario para trabajar conjuntamente. Esto explica porque las mujeres tienden a realizar una transición más rápida entre diferentes tareas, es decir, pueden hacer varias cosas a la vez sin problema alguno.
Estructura:
Biológicamente, las mujeres tienen un hipocampo (centro de la memoria humana) más grande y con mayores de conexiones nerviosas que los hombres. Como resultado, tienden a absorber fácilmente información sensorial y emotiva.
Esto les permite percibir claramente que pasa a su alrededor y conservar recuerdos durante largo tiempo.
Otra gran diferencia en la estructura cerebral de hombres y mujeres se evidencia en los hemisferios del cerebro. El género femenino tiende a tener centros verbales en ambos lados del cerebro, mientras que el masculino únicamente en el hemisferio izquierdo. Por eso, las mujeres usan más palabras al describir una historia o un sentimiento, mientras que los hombres son menos expresivos cuando se trata de sus emociones o experiencias.
Hormonal:
Los cerebros masculinos y femeninos procesan los mismos neuroquímicos, pero en diferentes grados y a través de distintas conexiones cerebrales. Ambos sexos poseen sustancias como la serotonina, la testosterona, y oxitocina en su cuerpo, pero en cantidades variadas. Debido al procesamiento de la tostestorona, por ejemplo, los hombres tienden a ser más activos y menos propensos a estar quietos. Las mujeres, de forma diferente, asimilan la oxitocina de mejor manera, sustancia que les ayuda a fomentar relaciones humanas. Otro claro ejemplo se visualiza en cómo las hormonas femeninas son propensas a reaccionar ante el estrés en relación a los hombres, que son más resistentes a sus efectos.
Flujo de sangre:
Debido a una mayor circulación de sangre en el cerebro, las mujeres tienden a reflexionar y volver a los recuerdos emocionales del pasado. Los varones, en cambio, analizan poco sobre una memoria emotiva para luego pasar a la siguiente actividad. Durante este proceso, optan por ocuparse, sin sobreanalizar los sentimientos.