El centro histórico posee una riqueza arquitectónica inimaginable. Le invitamos a descubrir la ‘Carita de Dios’ en su máximo esplendor.

Quito está de fiesta. Este mes celebra 485 años de fundación y para festejarla, qué mejor que conocerla otro poquito y enamorarse más de ella.

Uno de sus mayores atractivos es, sin duda, el centro histórico. La espectacular ciudad antigua de Quito está rodeada de montañas y volcanes andinos a 2 800 metros sobre el nivel del mar. Está asentada sobre 320 hectáreas y posee una riqueza arquitectónica inimaginable. Es considerado el conjunto histórico mejor conservado y uno de los más importantes del continente.

Solo este sector tiene alrededor de 130 edificaciones monumentales, muchas de ellas han resistido por siglos los embates de la naturaleza, incluyendo erupciones volcánicas y terremotos.

Ahora albergan un tesoro lleno de riquezas artísticas, culturales e históricas, conservadas a través de los siglos. Por ello, desde 1978, Quito es el primer Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad. Lo puede visitar cualquier día del año y a cualquier hora. La mayor parte de su patrimonio se lo divisa desde la céntrica Plaza de la Independencia o Plaza Grande, hasta la Plaza de San Francisco, con la iglesia ícono de la ciudad; y a lo largo de la tradicional calle de las Siete Cruces. En el trayecto encontrará el Museo de la Ciudad, la iglesia de El Carmen Alto, La Compañía, El Sagrario, La Catedral, La Concepción y Santa Bárbara. ¡Visítelo ahora!

EL MIRADOR DE EL PANECILLO

Una de las mejores maneras de iniciar el recorrido por la capital es subir al mirador de El Panecillo. Allí se encuentra la estatua de la virgen Alada o la Virgen de Legarda. Desde este cerro tendrá una vista espectacular del centro histórico. Observará parte de la zona moderna de la ciudad, que se desplaza hacia el norte y de los barrios asentados en las laderas de las montañas, que escoltan a la ‘Carita de Dios’.

Aquí también disfrutará de algunos platos típicos como: fritada, choclo con queso y habas, empanadas de viento con morocho, entre otras delicias. Por Navidad, el Municipio de Quito monta el pesebre de luces más grande del país. Anímese y vaya con toda su familia.

LOS DULCES QUITEÑOS

En su recorrido por el centro histórico hay diversos locales en los que encontrará los tradicionales dulces quiteños, que encantan a grandes y chicos. Las colaciones, los pristiños con miel, el dulce de higos, las mistelas, el maní confitado, la espumilla o los típicos helados de paila, son solo algunas de las delicias.

LA RONDA

La diversión comienza en la calle Morales, más conocida como La Ronda. Sus fondas fueron el punto de encuentro de músicos, artistas y poetas. Es decir, de la llamada filosofía bohemia. Hoy sus casas, ubicadas a lo largo de esta arteria, conservan intacta la esencia de años pasados.

Con sus típicos balcones, adornados con geranios, recibe a cientos de visitantes, quienes tienen la oportunidad de degustar los más deliciosos y típicos platos quiteños en sus bares y restaurantes, saborear exquisitos chocolates artesanos o ver el trabajo en orfebrería, hierro y madera realizado por manos expertas. La cultura está presente en cada cuadra. Si se decide a recorrerla, especialmente en la noche, hágalo saboreando un exquisito canelazo o una empanada de morocho.

¿QUE HACER?

Durante las fiestas de Quito, entre las 10:00 y las 18:00, recorra los talleres ubicados en La Ronda. En el de orfebrería conocerá como se transforman lo metales como: el oro, plata, bronce y cobre, en exclusivas piezas con estilos precolombinos, coloniales y contemporáneos. Y si quiere conocer los juegos tradicionales, qué mejor y hacerlo en Zabalartes, lugar en el que se rescatan y mantienen vivos los juegos de antaño.

UN RECORRIDO EN BUS

¿Qué tal si para visitar los lugares imperdibles de la capital, lo hace a bordo del Quito Tour Bus? En esta unidad de dos pisos puede subir y bajar en el lugar que prefiera, dentro de la ruta. Y lo mejor de todo es que manejará su tiempo y conocerá la ciudad a su antojo. El Ejido, La Carolina, La Ronda y el centro histórico, entre otros atractivos del norte y centro de la capital, son parte de los puntos que visitará.

QUITO DESDE LO ALTO

¿Quiere admirar la capital, asentada en mediode la cordillera andina, a 4 000 metros sobre el nivel del mar? Si se anima, hágalo desde el Teleférico de Quito, que lo traslada en cuestión de minutos desde la ciudad hasta Cruz Loma. En un día despejado puede admirar los nevados Cotopaxi, Cayambe y Antisana, así como todo el dorso de la cordillera andina. A quienes les gusta la aventura, lo ideal es llevar una bicicleta de montaña y emprender en ella el retorno a la ciudad.